Todas mis críticas llevan nota. Cada juego recibe una puntuación de cero a cinco estrellas reflejando mi opinión. Con esto no pretendo dar punto final a mis artículos sino ayudar a mis lectores a entender cómo veo cada título con respecto a los demás. Veamos qué significa cada nota:
★★★★★ Cinco estrellas, lo mejor de lo mejor. Estos juegos demuestran lo que es posible conseguir en nuestro arte. Son intrigantes, únicos y de una ejecución impecable. Esto no quiere decir que sean perfectos ni que se los recomiende a todo el mundo, sino que existen varios motivos por los que los considero excelentes.
Ejemplo: Dune utiliza una docena de mecánicas increíbles para crear una experiencia profundamente temática.
★★★★ Cuatro estrellas indican algo especial. Estos juegos destacan por encima de los demás. Quizás nos sorprendan con ideas nuevas o una narrativa inusual. Pese a sus imperfecciones, tienen aspectos rompedores que los elevan.
Ejemplo: Battlestar Galactica es tosco, pero su mezcla de aspectos cooperativos y competitivos lo han convertido en un clásico del género.
★★★ Tres estrellas están bien. Puede que no sea una maravilla, pero sigue estando bien. Los juegos de esta categoría suelen pecar de una falta de ambición, se parecen demasiado a otros títulos o tienen defectos difíciles de ignorar. Simplemente, no me llaman tanto.
Ejemplo: Riftforce, un elegante juego de cartas con un débil sentido de la identidad.
★★ Dos estrellas indican defectos. En esta categoría, las deficiencias pesan más que los éxitos. Quizás la ejecución no está al nivel de las ideas, o quizás sí que funcione como juego pero le falte interés. Generalmente, mercerá la pena echar una partida, pero será difícil volver a ellos después.
Ejemplo: Sid Meier’s Alpha Centauri, un título politicamente brillante lastrado por estrategias demasiado poderosas y una excesiva gestión de unidades.
★ Una sola estrella es un problema. Los aspectos positivos son pocos, y se ven superados en número por problemas más acuciantes. Los defectos mecánicos serios, los problemas de equilibrio y la clara falta de ambición son las causas más comunes por las que un juego acaba en esta categoría.
Ejemplo: Blood Rage, un título que me llamaba la atención pero que jamás llegó a darme una buena partida.
– Es posible conseguir cero estrellas. Un juego puede tener problemas tan serios o ser tan aburrido que no se me ocurren motivos para jugarlo. Esto sólo ocurre raramente, pero ocurre, y es importante saber cuándo ha pasado.
Ejemplo: Deep Sea Adventure podría haber sido un divertido pero se rompe al permitir que un sólo jugador evite que sus rivales pueden puntuar ni un sólo punto.
CONSEJOS
No le des más importancia a las notas de las que se merecen. Utilizo las puntuaciones para ayudarte a saber qué leer, ¡no para sustituir a mis críticas! Ponerle nota a los juegos es, tan sólo, una herramienta de clasificación, una forma rápida de resumirte mi opinión. Ten en cuenta que, al no usar medias estrellas, mis notas también cubren un espectro muy amplio. Dos juegos bastante distintos pueden tener una puntuación similar.
Para mí los juegos son una forma de arte. No los valoro por su tecnología, sus valores de producción o simplemente por funcionar. Simplemente, hablo de ellos como podríamos hablar de música, cine o literatura. Quiero que me aporten ideas interesantes, estéticas diversas y entretenimiento sin igual. Yo parto de esa base.
Por último, el precio apenas se menciona en mis críticas. Decidir si un juego es una «buena compra» depende de tí. Yo lo único que puedo hacer es dar mi opinión de la forma más útil, entretenida e interesante posible. Y espero que tu también lo veas así.