Liberté ★★★★
Liberté tiene las decisiones más difíciles de todos los juegos de mayorías que he probado. Tras su temática revolucionaria se esconde un juego opaco en el que los jugadores no controlan directamente a una facción. Las partidas pueden cerrarse con un estrechísimo margen de victoria o terminar súbitamente con un golpe monárquico. Es uno de mis juegos favoritos de Martin Wallace a pesar de sus defectos.